Un troll es aquella persona que se dedica a provocar, buscando siempre la provocación gratuita y encabronar a la gente si ningún otro objetivo que divertirse y reírse. Cuanto más se encabrona la gente y le sigue el juego más orgulloso estará el troll por conseguir su objetivo. Cuanto más se obvie al troll, menos probabilidades habrá que éste siga ya que no ha conseguido su objetivo.
Recuerdo, incluso antes de la época digital cuando era un renacuajo, haber sido un poco troll. Con un par de amigos nos dedicábamos a llamar a números de teléfonos aleatorios y gastar una broma. Si la persona al otro lado del teléfono se enfadaba nos divertíamos e, incluso, muchas veces les volvíamos a llamar. Si la otra persona no se enfadaba y nos seguía el juego, el juego ya no tenía diversión, colgábamos y no volvíamos a llamar.
Gerard Piqué es un troll y vive de la provocación. De ahí que debería seguir con él la misma máxima de DON’T FEED THE TROLL. Lo que busca siempre con sus declaraciones es provocarnos y encabronarnos. Si le seguimos el juego, habrá ganado y conseguido su objetivo y lo seguirá haciendo, porque sabe que es fácil conseguirlo. Si lo obviamos y dejamos que diga las estupideces que quiera, la broma ya no tendrá gracia, la dejará de hacer y, muy probablemente, quien quede en evidencia sea él.
Así que seamos inteligentes y, por muy difícil que sea: DON’T FEED PIQUE (THE TROLL)
