Alguien dijo una vez: Cuanto más conozco a los hombres, más me gusta mi perro. Con su permiso, me voy a permitir la libertad de modificar su frase y decir que: Cuanto más conozco el fútbol, más me gusta el Espanyol.
Siempre me consideré, no sólo un forofo del Espanyol, sino también del fútbol. Hace unos años me leía todos los diarios deportivos, escuchaba todos los partidos por la radio, veía todas las noticias por la TV y consultaba todas las noticias por Internet. Daba igual el equipo que fuese, me empapaba de toda la información futbolística que va de la Primera División a la Tercera (sólo los grupos catalanes). Era un enfermo del fútbol. Me apasionaba (y, de hecho, me sigue apasionando) este deporte y me gustaba saber lo que se movía en todos los equipos y aprender cada vez más de él. Siempre tuve la idea radical (lo reconozco) e irracional (también lo reconozco) que todo aquel aficionado a un equipo al que no le gustaba el fútbol, era un fanático que hacía más daño al fútbol que beneficio, porque no le permitía pensar desde la objetividad del deporte, si no que lo hacía desde la subjetividad de unos colores. De hecho lo sigo pensando, aunque cada vez veo que me estoy convirtiendo en uno de ellos.
Cada vez me repugna más en lo que se está convirtiendo el fútbol bicéfalo español. Cuatro diarios deportivos, dos de cada bando, cada vez menos objetivos e informativos y cada vez más vomitadores de bilis, mentirosos y manipuladores de la información. Las secciones deportivas de las TVs cada vez se parecen más a la prensa rosa y cada vez menos a una sección deportiva. Y los programas de radio no se quedan atrás. La información deportiva en España cada vez se olvida más de que esto es un deporte donde participan muchos equipos y cada vez más se parece a una guerra encarnizada de intereses de colores donde interesa más enviar mensajes de: “yo soy más guapo que tú y tú más feo y tonto que yo“. Una pelea de niños de a ver quién la dice más gorda y se queda más retratado con sus mentiras y su subjetividad. Y donde lo que menos interesa es la información. Todo esto, provocando el odio, la rabia y la falta de objetividad por parte de la gran mayoría de los seguidores al fútbol.
Un día decidí que, por mi salud mental y mantener mi criterio y opinión propia e independiente, dejaría de ver la prensa deportiva, ni siquiera las portadas, ya que ya me había cansado de tanta mentira. Pero me he dado cuenta que, inconscientemente, me está pasando lo mismo con la TV y la radio. Me he cansado del partidismo de unos, de la rabia de otros o del sensacionalismo de los de más allá. No leo prensa deportiva, no me gusta ver las secciones deportivas de la TV y sólo escucho un programa de radio de fútbol genérico (y más porque me gusta su formato que por su contenido)
Estoy dejando de ser un aficionado al fútbol que sigue con pasión unos colores, a ser un aficionado al Espanyol, a secas. Cada vez tiendo más a consumir sólo información del Espanyol y no toda, porque también me dedico a seleccionar lo que consumo. Me da pena, porque me gustaba la pasión con la que seguía este deporte, pero no me ha quedado otro remedio. Es lo que me han obligado a hacer, gracias a lo que se está convirtiendo nuestro fútbol: un generador de odio y de enemigos. Y todo por una guerra absurda, basada en unos simples colores, donde lo que menos importa es el daño que se nos hace a nosotros, los consumidores de la información basura.
Por eso, mientras más veo en lo que se está convirtiendo nuestro mediatizado fútbol más me gusta y me centro en el Espanyol. Por eso, mientras más veo en lo que se está convirtiendo nuestro mediatizado fútbol más me gusta el Espanyol y más orgulloso de estar alejado de este circo.
Un post conojudo el que has escrito y con el que me siento más que identificado. Yo también he pasado de ser muy futbolero a ser “sólo” muy españolista. Y mira que me gustaba ver los partidos de otros equipos, ya fuesen de primera, segunda e incluso segunda b, así como los de las competiciones europeas. Sin embargo, de unos años a esta parte apenas si veo al Espanyol y poco más. Sinceramente, el “periodismo” deportivo ha conseguido arruinar gran parte de mi pasión por el fútbol.
Hola Emilio, muchas gracias por tu comentario y por leer mi blog. Bienvenido. ¿Es posible que alguna vez te haya leído por pericosonline?
La verdad es que es una pena tener que renunciar a una pasión, por culpa de unas personas que se hacen llamar profesionales. Y lo que es peor, no pase nada, sigan teniendo audiencia y/o vendiendo periódicos y que no se pueda hacer nada.
Buenos días, tardes o noches,
Grande Dani, veo que no sólo escribes bien en código binario.
Estoy deacuerdo contigo en gran parte. Y te he de decir que yo soy de esos que según tú hago daño al fútbol, yo sigo los colores, los blaugrana y el deporte en que se practica me da más o menos igual. También he de decir que lo tengo un poco más difícil que vosotros los periquitos ya que siguiendo tus directrices yo debería ser un experto en Fútbol, Baloncesto, Balonmano, Hockey patines, Fútbol sala, Hockey sobre hielo, Atletismo, Ciclismo, Rugbi, Voleibol, Patinaje artístico, Beisbol, Hockey Hierba, incluso Basket sobre ruedas. ¡Ostras! ¡a cuántos deportes estoy haciendo daño!
Una pregunta: ¿si el Espanyol y los periquitos pudiéseis participar de esa bipolarización renunciaríais a ella en beneficio del fútbol y los demás clubs?
Abrazos1000 y nos vemos tomando unos mojitos.
Buenas,
Obviamente son opiniones y yo expongo la mía. En nuestro caso, pues tenemos equipo de basket femenino y, personalmente yo, ni sé en qué categoría juega. Existía (o sigue existiendo) equipo de atletismo con los colores blanquiazules y lo único que me suena es que corría (o corre) una tal María Vasco. Tuvimos equipo de fútbol sala y me enteré cuando, lamentablemente, ya había desaparecido.
Sobre, tu pregunta, no me quejo del beneficio que extraen Barcelona o Madrid de la bipolarización, sino de en lo que se han convertido los medios de comunicación deportivos en España y sus pseudo-periodistas. Y, obviamente, no tengo ningún interés en saber qué músculos se le marcan a Kameni, qué número de zapato calza Verdú o qué cuenta el guardaespaldas de nuestro presidente (son ejemplos reales), entre otras cosas.
Saludos.
Pericobcn, como lector si que participo (últimamente un poco menos) en P.O.L., aunque generalmente con otro nick que no es mi nombre, pero como escritor lo hice sólo unas 5 ó 6 veces y de eso hace ya mucho tiempo. Vamos, eran mas unas colaboraciones puntuales que no otra cosa.
Sobre lo que dice el culé, yo también soy de los que piensan que el principal culpable de la situación no son ni el barça ni el madrid, por mucho que se aprovechen, sino los medios de comunicación, a los que tan sólo les interesan estos dos equipos. Vamos, es que incluso cuando la liga la han ganado el Valencia o el Depor toda la información seguía siendo de los dos de siempre.